Miedo - Positivo o negativo?
El miedo es una emoción primaria provocada por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente o futuro.
Desde el punto de vista psicológico es un estado afectivo, emocional, necesario para la correcta adaptación del organismo al medio, que provoca angustia en la persona.
Todos sentimos miedo en nuestra vida, gracias a él hemos llegado a sobrevivir como especie. De no ser así habríamos muerto bajo las patas de un mamut hace miles de años.
Está asociado a palabras como “riesgo”, “amenaza” y “vergüenza” y a lo largo de la historia se ha recurrido a él para mantener “orden” en las sociedades.
Desde chiquitos nos educan con miedo para poder controlarnos. Aprendemos a tener miedo. Desde los cuentos infantiles como por ejemplo “El hombre de la bolsa”, pasando por el colegio y hasta en la propia familia, los castigos nos van haciendo temerosos.
Las religiones hablan y “usan” el miedo todas ellas.
Por enumerar razones podemos decir que el miedo:
- Nos sirve de protección.
- Nos mantiene alerta de posibles amenazas.
- Estimula la imaginación.
Concluimos que es positivo?
También podríamos decir que:
- Nos vuelve conservadores, conformistas.
- Nos paraliza.
- Nos aísla.
Es negativo entonces?
De hecho vemos que nos puede venir bien y despejarnos caminos o nos puede llevar a la destrucción.
Hay que enfrentar al miedo tomando sus partes positivas y luchando contra las negativas.
Si ignoramos su parte “buena” nos estaríamos quedando a merced de cualquier peligro que nos esté acechando.
Si lo sobre valoramos puede convertirse en sensaciones más pesadas como la ansiedad o la fobia que no son sino otra cosa que sentir miedo sin que parezca existir algún motivo claro. Estas nacen en la trampa del “exceso de protección”, generando más inquietud e inseguridad y retroalimentándose.
Los caminos para conquistar al miedo son básicos:
Aceptándolo e identificándolo primero y centrándonos en nuestra motivación para vencerlo después.
La voluntad, la razón y el por qué, la motivación en definitiva, es el arma más potente de la que disponemos para vencer al miedo y no caer en su lado negativo.
“El miedo es como un fuego en nuestro interior, si lo controlamos nos mantendrá calientes para seguir peleando, pero si no lo controlamos se extenderá y nos devorará”
gah.